Editorial

 Búsqueda de candidatos del PPD al parlamento.

El complejo tema de los estándares para definir el perfil aceptable de candidatos y candidatas del PPD al congreso nacional.

UN PUEBLO QUE ESTÁ OBSEVANDO.

La gran mayoría de los militantes y dirigentes del PPD sabemos que nuestra colectividad política atraviesa por el período más crítico en sus 34 años de historia, afectada -fundamentalmente- por una caída electoral; apuntados por la ciudadanía por casos como SQM; sin una presencia relevante en la histórica Convención constitucional; una baja en la elección de Alcaldes y una línea de flotación en la elección de concejales, entre otros aspectos.

Se suman a este escenario declaraciones como la de un concejal electo en Til Til (propuesto por las bases partidarias de la comuna), Camilo Pará, que conmovieron a la opinión pública por dichos totalmente contrarios a valores y principios que el PPD defiende y promueve en materia de DDHH, lo que significó separarlo de inmediato de cualquier vínculo con el partido y la presentación de una demanda civil por sus incomprensibles afirmaciones. https://www.eldinamo.cl/politica/2021/06/04/necesitamos-unos-balazos-un-femicidio-concejal-electo-con-cupo-ppd-en-til-til-sube-video-incitando-a-la-violencia-contra-las-mujeres/ 

Más recientemente, y con motivo de la declaración de la Convención Constitucional, exponiendo una legítima preocupación por temas de DDHH y debidos procesos, los escasos constituyentes electos por el PPD (dos militantes y un independiente) se abstuvieron o -como en el caso del ex senador Harboe- votaron en contra, desatando todo tipo de comentarios, injustamente negativos para el PPD. Aquello significó sendas declaraciones de la Secretaría nacional indígena, de la Secretaría nacional de DDHH y de la misma mesa nacional explicitando la incomodidad del partido con lo sucedido. (https://www.emol.com/noticias/Nacional/2021/06/04/1022935/concejal-electo-tiltil-femicidio-violencia.html)

En complemento, y luego del retorno a Chile del ex ministro del interior Rodrigo Peñailillo, y precisamente cuando su nombre estaba siendo considerado en algunos círculos de la elite partidaria como eventual candidato parlamentario, la militancia y dirigencia del partido fuimos sorprendidos con la noticia de que había renunciado ¡en octubre del 2020!...y no informó de aquello a la mesa nacional. Se podrá decir que está en su derecho. Por cierto. Y que no está obligado a informar de sus actos. Pero se trata de un ex militante que ocupó altos cargos políticos, en tanto militante del PPD. Por tanto, lo mínimo era informar de su renuncia, a tiempo, más que fuese como un gesto de cortesía hacia la colectividad que lo acogió por años.(  https://www.theclinic.cl/2021/07/09/a-mi-me-gustan-los-militantes-ruido-en-el-ppd-tras-las-aspiraciones-senatoriales-de-penailillo-como-independiente/ 

Y respecto de las elecciones internas previstas para el primero de agosto (en un par de semanas), se impuso un consenso forzado, al punto que la mesa ejecutiva, la directiva nacional y casi el 100%  del consejo nacional ya están prácticamente electos aun antes de que se realice la elección propiamente tal, pues no hay competencia democrática para elegir mesa ejecutiva.  

Para elegir a los miembros de la Directiva nacional (100 titulares) se inscribió -por "consenso", precisamente y en forma directiva- una lista cerrada de ¡100 candidatos/as! y algo similar, con leves excepciones respecto del consejo nacional. Competencias en regiones habrá sólo en cuatro, de tal modo que en 12 regiones la mesa directiva regional también se encuentra prácticamente electa, aún antes de la elección propiamente tal. Las únicas competencias admitidas se dan en las vicepresidencias nacionales, con una lista de carácter oficial, y una alternativa: "Por un socialismo democrático territorial, el PPD a las bases sociales", integrada por dirigentes históricos y de regiones dispuestos a competir democráticamente,  y lo mismo en las vicepresidencias nacionales indígena (Fermín Levio) y de la mujer (la periodista Marcela Espinoza). 

Solo en estas vicepresidencias los militantes que concurran a votar el domingo primero de agosto podrán elegir con alguna posibilidad de opción democrática entre distintas visiones. En lo demás, se trata de votos "administrativos o funcionales", es decir, para cumplir con el acto electoral y ratificar el consenso y tal vez, para saber qué dirigentes tienen más votos que otros en las listas cerradas y qué lista obtendrá cuántos vicepresidentes nacionales y...para qué.  Los votos que finalmente obtendrá la mesa ejecutiva (Piergentili, Toro y Pizarro) - que ya está electa- serán observados con especial interés.

Una apremiante búsqueda de candidatos/as al Congreso nacional.

El PPD debería reelegir a algunos  senadores: el independiente Pedro Araya en Antofagasta y Adriana Muñoz en Coquimbo. Luego se tendá que apostar a mantener el cupo senatorial en Ñuble, con Loreto Carvajal, y observar con detención las posibilidades de buscar y postular candidatos en Bio Bio y la región metropolitana, para lo cual aún no hay pre inscritos. En Magallanes, la directiva regional ya ha postulado como candidata a Senadora a la ex concejala y periodista Claudia Barrientos. Se trata de nombres de precandidatos que ya están reconocidos formalmente en la comisión nacional de búsqueda. Y está pendiente la decisión que debieran adoptar los ex ministros Francisco Vidal y Heraldo Muñoz, en particular, respecto de la región metropolitana. 

En cuanto a candidatos/as al parlamento, en dicha comisión se barajan diversos nombres, los que están en consulta con las direcciones regionales y con quienes se propone.  Por tanto, una vez que esté confirmada la voluntad de los convocados/as para ponerse a disposición de una candidatura a Diputados/as, la comisión entregará su informe a la mesa nacional y luego la mesa hará una propuesta al Consejo Nacional previsto para el sábado 7 de agosto.

Hoy, las grandes disyuntivas del PPD (y piedras en el camino).

Varios temas atraviesan este proceso de búsqueda, selección y propuestas de candidatos/as al congreso nacional, en medio de este complejo escenario de cuestionamientos de credibilidad y confianza ciudadana en los partidos tradicionales, y representan al menos varias aristas o espinas muy complicadas que ya están presentes en las reflexiones correspondientes y son los siguientes. 

1.- ¿ Presentar candidatos/as en todos los distritos posibles o sólo en donde el indicador de elegibilidad sea más confiable?. Este es uno de los llamados "temas duros" del proceso y seguramente también está presente en diversas otras colectividades políticas. Los partidos tradicionales ya no cuentan con esa varita mágica, desde los tiempos del sistema binominal, en que primaba la idea "del que tiene mantiene" o que los candidatos podían asegurar muchos votos si provenían de la farándula, poseían grandes imágenes medíaticas o una trayectoria indiscutida en diversas instituciones, etc. y por tanto aportaban un caudal importante de votos.

El PPD tuvo bastante de aquello en varias elecciones populares anteriores y tuvo varios resultados virtuosos en lo electoral y a su vez complejos y disímiles en cuanto a sus resultados.  En cierto modo la ciudadanía estuvo dispuesta a respaldar esa idea de "las grandes figuras mediáticas", un poco para contrarrestar los rostros ya habituales, pero los partidos no asimilaron de manera suficiente que ese esquema -demasiado reiterativo- estaba cansando a los electores y agotando su paciencia. 

El caso más emblemático del PPD fue el de la candidatura de un disjokey porteño, famoso, popular y acogido por la juventud, que fue presentado a nivel regional por autoridades del PPD como candidato a Alcalde en Valparaíso en el 2016  con distintos argumentos en favor de la potencia de su popularidad y casi segura elección....Y su derrota fue estrepitosa... Este hecho despertó en ciertos sectores del partido una importante precaución a futuro.

En la elección de constituyentes, en mayo 2021, el caso del afamado actor Francisco Reyes, querido y respetado por la ciudadanía, no fue suficiente y fue derrotado. Además él mismo manifestó que no quería aparecer "muy ligado" con el PPD...Y así. Otros casos.

Hoy este estándar de figuras del cine, la música o de la farándula o personajes muy mediáticos o que ocuparon ciertos cargos ministeriales ya no revisten para un partido político el mismo atractivo y menos reviste interés para la ciudadanía, salvo en el caso de los constituyentes, en donde se entiende que los convencionales electos no guardan para sí el interés ni el privilegio de "saltar" de inmediato desde la convención al parlamento.  Salvo en cuatro años mas.  

Si algo quedó claro en el proceso de elección de constituyentes es que el país está ansioso de elegir nuevos rostros sociales, de mujeres, de pueblos indígenas (y esto  no es un tema biológico) y con mayor empatía con los problemas sociales, más cercanos y con una trayectoria que no presente cuestionamientos conductuales en lo social, lo legal y lo político. La pregunta para el PPD en general es entonces: ¿Que estándar prevalecerá respecto de este punto? ¿Nuevamente, la búsqueda de "personajes mediáticos"?...

2.- La "Ficha limpia" y sus bemoles. En principio todos estamos de acuerdo, pero...

Éste es lejos, el tema más delicado y que reviste mayor dicusión hoy en el PPD. Uno de los compromisos señalados por el entonces candidato a la presidencia del PPD, Heraldo Muñoz (en el 2018, y en un marco de una convocante competencia democrática con otras dos listas),fue impulsar la idea de una "Ficha Limpia" para quienes postulen a cargos de representación popular. Esto es: que sean candidatos/as cuyo historial de vida, social y político no sea cuestionable en ningún sentido. 

En debates muy recientes se ha levantado la idea de que el concepto de "Ficha limpia" debiese ser aplicado en el actual proceso de búsqueda de candidatos/as al Congreso nacional, en base a categorías "estrictamente objetivas", de carácter legal, como por ejemplo que el precandidato/a no haya sido sometido/a  a jucio y/o haber sido condenado recientemente y/o que no cumpla con sus obligaciones familiares como la pensión alimenticia. Estos antecedentes serían suficientes para invalidar su postulación interna. Se dice que serían los únicos "datos objetivos" para no aceptar una precandidatura. 

Se agrega a este predicamento que los partidos políticos no pueden aceptar las "plazas públicas", es decir, cuando los ciudadanos apuntan a determinados personajes políticos y los encaran o los enfrentan o, como ha ido sucediendo en estos meses del post estallido, simplemente los acosan o agreden, por haber tenido alguna relación con hechos de corrupción y/o transfuguismo político; por haber votado en el congreso o en el municipio en contra de alguna iniciativa popular o por declaraciones consideradas como contrarias al interés ciudadano en favor de los DDHH, etc.  E incluso estos temas ni siquiera son los únicos. La figura de los "políticos" está siendo -en general- cuestionada, como ocurrió el martes 13 de julio en la plaza de Armas de Santiago, nada menos que con el diputado Jackson, fuertemente increpado por un amplio grupo de manifestantes y ciudadanos transeúntes....Y es un exponente de las nuevas generaciones, tan recurrido como concepto para la "renovación" de la política. 

Se señala, al respecto, que los partidos políticos no pueden aceptar que diversas formas de exacervación de las personas en contra de determinados políticos, incluso aun cuando nada tengan que ver con hechos discutibles pero que dirigen o simplemente forman parte de partidos tradicionales que hoy están en la mirada crítica del pueblo, sean criterios que determinen si una persona puede o no ser candidato/a.  

El problema con este tipo de argumento es que se desconoce una realidad: los ciudadanos saben distinguir y su paciencia se agota con el tradicionalismo de las actuaciones políticas,  y lo que son sus reacciones, y muchas de ellas hay que saber comprenderlas, están basadas en el juicio a una trayectoria política que finalmente les parece muy discutible. 

Por décadas el país tuvo que admitir a regañadientes que ya no se podía zafar de ciertos grupos de parlamentarios o alcaldes o concejales que echaron raíces en el Congreso y en los Municipios gracias al sistema binominal que ofrecía una competencia extremadamente regulada o limitada o simplemente inexistente. Tales grupos de representantes populares se acostumbraron a que "sus cupos" serían permanentes. Por tanto, y naturalmente como sucede en la vida, se acomodaron. Y de paso, sumaron importante privilegios. Y taponearon una natural renovación de liderazgos sociales y políticos en sus partidos. A nivel de gobiernos se instaló fuertemente la crítica a la "silla giratoria". El chiste del Palta Meléndes, en el festival de viña del mar,  imitando al presidente Allende desde el más allá, aún cala profundo en el imginario de las masas: "...Cómo han cambiado los compañeros"...



La relación de partidos y políticos de todos los colores con el dinero fue otro elemento que ha estado presente en la crítica social. Durante años el financiamiento de campañas electorales fue oscuro y nunca transparente. En todos los partidos, franquearon negocios políticos y dineros de terceros que fueron a dar a las campañas parlamentarias. Todo el país lo sabía, pero no había forma de poner el tema en la superficie de manera consistente. El "caso coimas" en el 2002, que lamentablemente tuvo al PPD como epicentro, develó una compleja trama con ribetes delictuales, pues un "compromiso no cumplido" a cambio de dineros, hizo que los "afectados" por aquello pusieran la información de datos "confidenciales"  a disposición de la Revista Qué Pasa y el tema irrumpió con fuerza, provocando un terremoto grado 9 en el PPD y figuras refulgentes del partido fueron damnificadas, algunas de ellas, sin retorno. 

El presidente del partido en ese período, Guido Girardi, comprendió la magnitud del problema y optó por renunciar a la presidencia partidaria en un gesto muy digno, para llamar a tomar medidas.  La Directiva nacional fue convocada con urgencia y se convocó a una nueva elección interna. El entonces diputado Víctor Barrueto tuvo el coraje de presidir el PPD en esa crisis y logró sacarlo a flote con el II Congreso de Ideas y propuestas y algunas otras iniciativas. Pero el PPD, en gran parte e  injustamente quedó marcado con una cicatriz profunda y visible, para siempre.  

De ahí en adelante, el tema de los dineros en política y el tráfico de influencia fueron generando muchos debates hasta llegar a una Ley de Partidos Políticos que hoy regula estas instituciones, más una Ley de financiamiento público de los partidos, para evitar la influencia de dineros en su desarrollo, con elevados estándares de fiscalización, y fnalmente una Ley de financiamiento de campañas electorales que puso fin a la espuria relación de dineros entre empresas, partidos y campañas y limitó -por ley- las "donaciones" que ahora deben declararse formalmente ante el Servel, y las empresas ya no pueden hacer donaciones a los partidos políticos y sus campañas.  En términos de publicidad la ley de financiamiento electoral prohibe las gigantografías ultra-millonarias en la vía pública y todo tipo de gasto oneroso en radio y tgelevisión que afecte cierta equidad de recursos y publicidad en las campañas. Usted puede pensar que igualmente algunos políticos se las arreglan para conseguir "recursos frescos"...Si, sin duda, pero ya no es un procedimiento masivo y ahora se puede saber cuándo ocurre y en qué circunstancia y los que son descubiertos en el tráfico de influencia arriesgan sus carreras políticas y todo esto es un gran paso. El "caso Orpis" es emblemático de aquello que les espera a los políticos denunciados por casos de corrupción. Y otros.

Tener cuidado, entonces, con el juicio rápido ante el sentimiento ciudadano crítico: aquello implica razones que cambian la sociedad y la cultura.

Otros dirigentes sostenemos que  la variable llamada "objetiva",  y sólo de carácter legal no es suficiente y que  hay que sumar una dimensión subjetiva que tiene mucha importancia  pues la ciudadanía observa con ojos críticos a los partidos políticos y particularmente al PPD. ¿Qué significa esto?  Que no basta que la persona que se postule al parlamento no haya sido sometido/a a ninguna investigación de carácter judicial o que habiendo estado en sus carpetas, finalmente todo terminó en nada (y ya sabemos que cuando el río suena....) y/o que fue sobreseído/a de toda sospecha... Un político y su partido -inevitablemente- están sometidos con rigurosidad al escrutinio público y si se enredan en negociaciones dudosas o se les descubre situaciones poco claras ya estarán afectados. Y así debe ser porque son "representantes populares" y deben ser sujetos de ejemplo y testimonio.

El testimonio de vida de un político es su principal capital. Pero también ocurre que para cierto tipo de políticos, lo principal es el poder y acumular más poder y ejercerlo, muchas veces sin un sentido de consecuencia y apostar por el clientelismo, creando redes de influencia y/o militanes incondicionales en un partido.    En partidos políticos los militantes se quejan, con justa razón, que en su comuna o en su distrito o circunscripción el representante popular se distanció de la colectividad, no contribuye a generar nuevos liderazgos (en parte por temor a la competencia) y/o sólo se vincula principalmente con un grupo cerrado de personas de mucha confianza...En elecciones municipales este dato es siempre observado como un buen indicador: ¿Cuántos Alcaldes y concejales se elegieron en un distrito y/o circunscripción cubierto con parlamentarios del partido?... La militancia en un partido observa estos detalles.

En suma: la política siempre será la expresión (o al menos se debe intentar) de una noble vocación humana y social. Si se lleva con dignidad, esto significa sencillez y compromiso, consecuencia, coherencia y trabajo social para reforzar la comunidad de origen y darle un sentido; luchar por los grandes intereses de la justicia y de la paz, por una sociedad más digna. Estudiar los temas y no quedarse en consignas. Sostener un vínculo permanente con la gente que ayudó a la elección de un representante popular. Por el contrario, si el ejercicio del poder político bajo una lógica de "sociedades de control partidario" se extrema y se posiciona sólo en la perspectiva de influir para adquirir más poder, siendo esto parte de tareas asociadas a lo anterior, es dable suponer que los sentidos del "ser político" comienzan a desvirtuarse y el partido que tan solo debe ser un medio se transforma en un fin en si mismo, para el grupo controlador.   Y la gente, sencilla o modesta, ilustrada o no, se da cuenta y comienza a observar y tarde o temprano, estalla. Es natural que ocurra, porque esto es parte de la vida, especialmentge cuando un político se desvía de una senda en la que todos los ciudadanos esperan que camine limpio.

Ciertos valores de la cultura mapuche.

En la cultura ancestral mapuche, desde antes de la llegada del hombre occidental a nuestras tierras, siempre han existido tres componentes basales que definen los cacicazgos:

a.- Nurche: los que cumplen su palabra.

Cuando tuve el honor de dirigir la Conadi (1997-1998) hasta cuando renuncié por estar en contra del proyecto Ralco, un gran hermano que formaba parte de la comisión de temas culturales de la Corporación, me ayudó a comprender en profundidad muchos aspectos de nuestra cultura que no conocía de manera suficiente por mi condición de warriache (mapuche urbano). Y me llamó la atención cuando -con motivo de mi primera gira a comunidades del territorio de Ercilla- me hizo una recomendación: "Director, nunca llegué tarde a una reunión de comunidad. Si usted se comprometió a estar ahí a una hora, no importa cual sea la distancia desde Temuco, pero los hermanos lo van a estar esperando y ellos recorren grandes distancias".  Me hizo sentido y aunque normalmente -no siempre- soy puntual, entendí que en ese mensaje había algo más profundo.  Salí de Temuco, entonces, con tiempo anticipado y acompañado del jefe de tierras y aguas porque había que abordar una demanda indígena y llegué a una muy modesta sede comunal en un predio rural al interior de Ercilla. Y llegué a la hora comprometida.

Y dicho y hecho: ya estaban ahí la mayoría de los asociados de la comunidad. Los saludé uno a uno. El día era muy frío y el brasero de la modesta sala de la sede comunitaria hacía lo que era posible. Compartimos mate y café y unas ricas sopaipillas. Antes de comenzar la reunión de fondo les pregunté de dónde era cada uno/a. Y me di cuenta que venían de lugares muy apartados, algunos caminando, otros en carreta y algunos pocos en alguna vieja camioneta o a caballo, en promedio entre una y hasta tres horas de camino. Era importante para ellos reunirse con el Director de la Conadi. En ese momento comprendí que habría sido imperdonable llegar atrasado o estar tan solo un ratito ("visita de médico") y salir cascando a otra reunión...

La palabra, en el mundo mapuche es sagrada y fundamental, por una razón ancestral. Nuestro lenguaje no era escrito desde antes del descubrimiento. A diferencia nuestra, los Mayas sí habían inventado la escritura siglos antes. Pero en nuestra cultura lo principal que construye confianza es la palabra: miéntale usted a un mapuche y pasará muchísimo tiempo antes de recuperar su confianzan y credibilidad. Por eso, entre otras ofensas a un indígena, el engaño (especialmente en política) es casi un delito en términos de una sana convivencia.

De ahí en más, siempre tuvimos cuidado en Conadi en cuanto a que la genda del Director y de otros jefes del servicio se cumpliese de manera estricta. Y lo que ya era un hábito se convirtió en un compromiso. Los políticos, por lo general, hablan mucho. Pero son muy pocos los que cumplen. Y casi nunca son puntuales y siempre cuentan con importantes excusas... Mi padre me decía desde niño: "si no vas a poder cumplir con la tarea (barrer el patio, sacar la basura, etc) me lo dices y conversamos. Pero las tareas se cumplen. Nosotros somos nurches"...

b.- Kümeche: no basta cumplir la palabra. Hay que hacer el bien. En relación con los conflictos del sur, miles de familias mapuches participan en grandes marchas por sus demandas históricas. Se trata de un derecho. Los lídes indígenas se deben distinguir por buscar lo mejor para su gente y su comunidad. Este es el sello distintivo de sus liderazgos. La mejor señal pública en estas semanas ha sido la elección de una mujer mapuche, Elisa Loncon Antileo, hablante, profesional destacada (doctora en Humanidades), que mantiene sus vínculos con su comunidad de origen. Resalta su sencillez y humildad. Nada de riquezas materiales. Una ciudadana "común y corriente" y sin embargo, aprovechando el impulso de una trabajosa Ley de Escaños reservados, el pueblo mapuche la empujó a un liderazgo que ni ella se imaginaba.

Elisa Loncon fue nuestra invitada, por parte de le Embajada de Chile en Guatemala en enero del 2015,
cuando tuve el honor de presidir la misión diplomática como el primer Embajador chileno de origen
indígena en la historia diplomática en el país.

Lo conversamos muchas veces. La conocí en el marco de la primera huelga de hambre de presos mapuches en octubre del 2010 y desde ahí forjamos una gran amistad. Muchas veces, en estos 12 años de caminar, en diversos talleres, encuentros y libros que publicamos juntos, solamente soñábamos (pewmas) con la idea de que alguna vez, más temprano que tarde, llegaríamos a un debate nacional por una sociedad intercultural y plurinacional. ¡Pero eran puros sueños!. No había por dónde. Y las tensiones y conflictos crecían. Y nuestra clase política: ciega, sorda y muda. Pero ahí estaba Elisa, con su tono maternal y sereno y su profundidad académica, siempre confiando en un mejor futuro. 

En su vida, Elisa ha hecho mucho bien, en su familia, con su comunidad y con los centenares de estudiantes a los que ha formada por años. Impulsó la ley de lenguas indígenas (que todavía duerme en el congreso) y lentamente se convirtió en referente del pueblo Mapuche. Elisa Loncon ha vivido siempre con transparencia y sin ningún aspavientos ni más poderes que sus conocimientos ancestrales, su vida de comunidad y sus pewmas (sueños).

Aquella difícil mañana de instalación de la Convención constitucional de Chile y luego de ser electa presidenta, el emotivo discurso de Elisa -desde lo más íntimo de su piuke (corazón)- conmovió a millones de chilenos que siguieron la transmisión en televisión y el país comprendió, al fin, que estábamos frente a un nuevo ciclo histórico, dirigido por una mujer proveniente del pueblo mapuche, despreciado y discriminado históricamente. La paradoja del destino de una República soberbia y racista que ahora tiene que aceptar que su nuevo destino constitucional, precisamente, descansa en la sabiduría del liderazgo de una Puñeñelcheve, la mujer que en una comunidad acompaña la gestación de un parto; nuestra weichafe zomo, mujer sabia. 

c.- Kimche: oir, escuchar mucho y aprender de la sabiduría de los otros. Un cacique, un líder o lidereza de una comunidad mapuche debe tener la disposición a escuchar, primero, y opinar después. Esto deriva de la cultura de vivir por siglos en armonía con la naturaleza, escuchando sus señales. Mi padre era capaz de algunas pequeñas cosas increíbles. A mi corta edad, siendo muy niño, a veces, por jugar según yo, después del otoño, levantaba su dedo índice y lo movía en el aire. Y yo le preguntaba: "¿Qué está haciendo"? y con su mirada festiva me decía: "Mañana va a llover"....Y efectivamente llovía. Y en Valparaíso las lluvias son con viento fuerte, especialmente en los populares cerros porteños. Entonces, me decía, que al mover el dedo índice, el viento le daba un mensaje. Yo lo miraba incrédulo.  Y así, mis tíos de la comunidad Namuncura, cuando viajaban para visitar a mi padre, contaban muchas historias de sus siembras, sus árboles, de su campo y cómo sabían cuando un paño de tierra "estaba cansado" y había que darle reposo. Sus enseñanzas decían que la naturaleza hablaba y que ellos conversaban con sus árboles y sus flores.  También contaban historias fantásticas como la del tren-tren (serpiente de la tierra) y cai-cai (serpiente del agua) y de sus encuentros y desencuentros. Historias fascinantes heredadas de su convivencia permanente con la naturaleza. Los pueblos indígenas siempre han sido protectores del medio ambiente, por ese diálogo ancestral con la madre tierra.

En una comunidad indígena convocada para debatir diversos temas, las conversaciones son extensas y profundas. Se dialoga con espíritu de comunidad porque se requiere saber y comprender el pensamiento de todos y sólo cuando se ha ido construyendo un acuerdo en cuestiones fundamentales, un Trawun (encuentro) habrá cumplido su propósito. Son prácticas ancestrales y tenemos muchísimo que aprender de estas enseñanzas de vida.

3.- Otro elemento subjetivo a considerar es si un militante, en el desempeño anterior de cargos públicos, participó directa o indirectamente en relaciones contractuales con empresas o personeros del mundo financiero altamente cuestionables por historias de influencias del dinero en el mundo de la política activa, aunque aquello no fuese motivo de investigación judicial o habiéndolo sido no se llegó a una conclusión, aún existiendo antecedentes de aquello, y si aun así pueden ser candidatos/as del PPD al parlamento. 

4.- Y otro tema no menor, es aquel relacionado con la escala de valores en una comunidad política, como por ejemplo el rechazo del PPD -en su declaración de principios- sobre cualquier forna de nepotismo en política: ¿Qué ocurre con este valor si determinados candidatos al parlamento en una región forman parte de una misma familia, en donde el padre y los hijos se "reparten" los cupos?  Hemos conocido casos en el PPD en los últimos 25 años.

5.- Finalmente, y según lo ya señalado el PPD necesita elegir una cuota específica  de parlamentarios para sostenerse por sobre el mínimo legal de un 5% del electorado ¿Porqué? Porque la Ley de Partidos Políticos estableció dicho umbral como un piso mínimo para el financiamiento público y sobre todo para la legalidad vigente de un partido. Este punto, unido a la relativa caída electoral desde el 2012 a la fecha, preocupa a diversos dirigentes y en medio de aquello emerge un criterio "pragmático" y muy discutible: el que no debiera importar mucho de dónde vengan los candidatos/as. Lo que importa es que traigan votos. Es una idea circulante. 

Si aprobamos este "principio pragmático", o hacemos "vista gorda" de aquello el PPD estaría hipotecando cuestiones sustantiva que dicen relación con su sentido de ser. Y vamos directo al punto. En el extremo sur, en Aysén,  se plantea que un diputado en ejercicio, René Alinco, sería una "carta segura" para el partido por su caudal de votos. Alinco fue electo diputado por el PPD. Luego renunció al PPD. Pasó un tiempo fuera del parlamento.Después volvió al PPD y luego volvió a renunciar....Y mientras fue diputado de nuestra bancada siempre apeló a su "independencia" y votó lo que estimó conveniente aunque aquello estuviese o no en sintonía con el partido. Hoy, si fuese candidato por el PPD, eventualmente volvería a nuestras filas (aunque ya está "re-invitado" en la bancada) y -probablemente- volvería a ser electo...y el partido se beneficiaría de sus votos...

En Magallanes y apropósito del tema del nepotismo, con la familia Bianchi que no milita en el PPD, algunas autoridades partidarias gestionan la posibilidad de que el senador actual, que no puede repostular al senado, "bajaría"-eventualmente- a ser candidato a diputado y que su hijo, Karim, "subiría" a Senador....Ambos en representación del PPD, como independientes asociados...

Con razón dirigentes regionales responden a esto con propuestas de nombres provenientes de sus propias filas históricas: la ex concejala Claudia Barrientos, periodista, con una larga trayectoria de trabajo social, candidata a Senadora y Marcelo Aguayo, dirigente social muy valorado en la región, militante, candidato a Diputado. Pero una parte de la elite partidaria tiende a inclinarse en favor de la familia... Algo relativamente similar se podría presentar en el norte. El Senador Pedro Araya, independiente, que debe ir a la reelección ha expresado interés de  postular en el PPD a su hermano como candidato a Diputado...Y así.

Y en Santiago, en el distrito de Maipú-Cerrillos, con la idea de reforzar una eventual candidatura al parlamento del ex concejal Erto Pantoja, se sugiere levantar el nombre del ex senador socialista Fulvio Rossi, ahora independiente, como candidato del PPD... Y anda rondando en el aire, como ha señalado el presidente de la comisión de búsqueda, Girardi, el caso del ex ministro ahora independiente, Rodrigo Peñailillo en Bio Bio por su pasado en relación con financiamiento dudoso, aun cuando nunca ha sido juzgado ni condenado. El punto es que en todos estos casos, lo esencial es la forma cómo estos temas se perciben en la ciudadanía la que hoy está mucho más atenta y crítica. El PPD no debería postular candidatos al parlamento con este nivel de interrogantes.

La pregunta de fondo y muy fundamental, respecto de estas propuestas y otras que pudiesen surgir: ¿Los militantes y dirigentes del PPD están dispuestos a aceptar la continuidad de estos criterios en la selección de candidatos/as al Congreso Nacional? ¿Ante una sociedad que nos observa críticamente?  Habemos quienes ya hemos venido expresando claramente nuestra oposición a aquello, precisamente, para resguardar al PPD de nuevos y contundentes cuestionamientos ciudadanos. Pero no es suficiente. Se requiere una militancia y dirigencia con conciencia política para abordar estos temas.

Entonces, como ya se podrá entender, la sola "razón objetiva" de la Ley, no es suficiente para abordar una definición de candidatos/as al congreso nacional si queremos, de verdad, mostrar un partido en proceso de renovación y confirmación de sus valores y principios. Y esto no es una "ceguera" de nuestra parte ante la necesidad de conseguir votación. La pregunta de fondo es ¿Qué precio queremos pagar para conseguir votos?¿Importa ganarlos a cualquier precio? . That is the question.

Y no son temas baladí o menores, o que hay que mantener en un bajo perfil y debatirlos de preferencia en circuítos cerrrados del PPD....  Después del estallido social del 18 de octubre aquel, el país y la ciudadanía parecen caminar por otros rumbos, de mayor exigencia cualitativa para la política y los partidos, para el Estado y sus instituciones. Hay un cansancio además con prácticas poco democráticas (como forzar consensos cuando la democracia de un partido requiere ser reforzada con más democracia). Y otro cansancio con ciertas "sillas giratorias" (que se rompió claramente con la elección de convencionales y de alcaldes y concejales) y una cierta "vista gorda" respecto de trayectorias cuestionables...

Todos estos temas merecen de parte de toda la militancia del PPD una reflexión muy profunda y poner en ejercicio nuestra férrea voluntad de actuar en conciencia, sin cálculos y con un recto discernimiento de los hechos. Al final de cuentas, nos estamos jugando no solo la existencia y sentido de ser del PPD sino, principalmente, el valioso tiempo -voluntario- y la energía y compromiso que todos/as o muchos militantes estamos compartiendo desde hace varios años para que la política cambie, para superar las malas prácticas, para lograr que el PPD se renueve y recupere parte importante de la confianza y credibilidad que el pueblo de Chile depositó con expectativas en nosotros.

No son temas menores. Admiten matices, por cierto, y conversarlos abiertamente es ya un primer ejercicio democrático. Lo que resolvamos determinará parte importante de nuestro rumbo.

Domingo Namuncura
Editor


2 comentarios:

Unknown dijo...

Una autocrítica sustentable y reflexionado.creo que en justa verdad una verdad cruel...lejos están los buenos tiempos.y se alejan .ahora estamos en las playas movedizas de la cultura humana....hay que revisar el y vitalizarce como militante que somos.ejercer nuestra voluntad partidaria llegar con nuevos bríos y voluntad para ejercer un liderazgo permanente para el futuro.la asamblea general será el primer puente para enfrentar los desafíos..sr namuncura gracias por esta gran lección de autoanálisis.

Anónimo dijo...

Mucha verdad en todo lo expresado. Concuerdo plenamente.

Comisión Nacional Electoral